Por otra parte, el aumento de la prevalencia de la obesidad y el sobrepeso en la población infantil contribuye a un incremento de la incidencia del síndrome de apneashipopneas del sueño (SAHS) en los niños y también, de forma directa e indirecta, del riesgo vascular. Consecuencias cardiovasculares del SAHS en la población pediátrica Estudios epidemiológicos han demostrado que los trastornos respiratorios durante el sueño (TRS) son muy frecuentes en la población pediátrica y, del mismo modo que en los adultos, también están asociados a riesgo cardiovascular10. Puma, una de las marcas deportivas que más ha destacado en toda la historia, nos ofrece acá todos y cada uno de los modelos de chándal que hay en el mercado con las peculiaridades más cómodas que te puedas imaginar, descubrelos todos en nuestra página. Es por este motivo que la Academia Americana de Medicina del Sueño separa de forma clara ambas entidades y las incluye en apartados diferentes en su clasificación2.
4. Susceptibilidad genética, que podría ser un factor determinante en el caso de los niños con antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular. Por último, los trastornos del sueño en general y el SAHS en particular influyen de forma clara en la calidad de vida del niño y también en la de sus cuidadores en el caso de los niños con discapacidad. Desde el punto de vista neuroconductual está plenamente demostrado que pueden presentar problemas de aprendizaje, con disminución del rendimiento escolar, labilidad emocional, fenotipos conductuales que se han venido en denominar trastorno de déficit de atención con hiperactividad-like y, en definitiva, situaciones que afectan a la calidad de vida del niño y de su familia8. Habitualmente, el pediatra de atención primaria es el objetivo al que van dirigidas las guías clínicas publicadas, pero no debemos olvidar que el manejo diagnóstico y terapéutico del SAHS es claramente multidisciplinar. Los estudios de sueño en casa se clasifican de acuerdo a su nivel de complejidad y atención. Otras indicaciones son sospecha de movimientos periódicos de los miembros durante el sueño y otros parasomnios, como el trastorno del comportamiento del sueño REM (rapid eye movement). El SAHS es una patología altamente prevalente en la edad infantil, que afecta entre un 2 y un 4% de niños con edades comprendidas entre los 2 y los 6 años 1. Respecto al ronquido, las cifras alcanzan del 7 al 16,7% de 6 meses a 13 años y del 5 al 14,8% en adolescentes3,4.
Desde hace dos décadas existe un interés creciente por los TRS en la edad pediátrica, justificado por las graves consecuencias que pueden provocar en diferentes sistemas. El PSG de titulación tiene los mismos parámetros del basal, pero el canal de flujo por cánula nasal se reemplaza por el de flujo que se obtiene de la máquina de PAP. Ya que el uso de una cánula nasal debajo de la máscara es incómoda, se acepta, por consenso, que una buena forma de detección de apneas e hipopneas sea grabar la señal de flujo aéreo generada por el aparato de PAP o estimar el flujo aéreo por la medición de la diferencia de presiones entre la máscara y la salida de la máquina, para lo cual se usa un transductor de presión con o sin transformación de raíz cuadrada de la señal. Todas las anteriores recomendaciones también son válidas para el incremento progresivo de la PAP inspiratoria (IPAP) durante la titulación de BiPAP, en cuyo caso las presiones de inicio son de 8cm de agua de IPAP y 4cm de presión espiratoria positiva (EPAP).
Por consenso, también se decidió recomendar que la presión máxima a alcanzar durante la titulación de CPAP sea de 20cm de agua en adultos, y que se continúe la titulación con modalidad de BiPAP, en caso de que los eventos respiratorios no se hayan corregido ni con una presión de CPAP de 15cm de agua. Se asocia habitualmente con síntomas que incluyen el ronquido y trastornos del sueño1. Se debe instruir al paciente en guardar normas de higiene de sueño una semana antes del PSG, con énfasis en la regularidad para acostarse y levantarse, a fin de asegurar 7 a 8 horas diarias de descanso. El registro polisomnográfico se debe realizar cerca de 6 horas por la noche o en el pico de mayor somnolencia y en todas las posiciones corporales (decúbito lateral izquierdo, derecho y supino). El técnico debe estar sentado en un área próxima al cuarto del paciente, pero separado de este, chandal psg en donde pueda observar de forma continua el registro polisomnográfico y el video del paciente. El conocimiento del SAHS en la infancia ha estado muy limitado hasta hace relativamente poco tiempo. La hipertrofia amigdalar y adenoidea, las malformaciones craneofaciales, la obesidad, las enfermedades neurológicas como la parálisis cerebral infantil, las enfermedades neuromusculares, el reflujo gastroesofágico y la obesidad son algunos de los factores de riesgo que con mayor frecuencia se presentan en la infancia.