Messi llegó a París en agosto de 2021 con un contrato de dos temporadas más una tercera en opción, procedente de su club de toda la vida, el Barcelona, que se dijo incapaz de poder pagarle. La estrella parisina cargó contra su club por la utilización de su imagen en una campaña de renovación de abonos. This content can also be viewed on the site it originates from.